Lenguaje de cambio en la depresión.

Ruth Valls
El lenguaje de cambio:
¿Cuales son las cosas que quiere mejorar en su vida?
¿En qué proyectos se quiere comprometer?
Plantearse estas preguntas es el inicio de un cambio de larga duración.
En primer lugar para alcanzar un cambio, se entra en un dilema en el cual existe una disconformidad con la vida actual y se formula internamente un deseo de vivir de otra manera. En este momento, valoramos nuestras aptitudes y capacidades. Si éstas nos ayudaran para llegar a donde nosotros queremos.
El tener confianza en uno mismo es muy importante, y en este punto la ayuda psicológica se considera primordial. Estos serían sentimientos de “eficacia personal”. Este discurso podemos decir que es el preparativo para el cambio. El hecho de llevar a cabo estas consideraciones ya es un gran avance.
En este proceso se irá produciendo la revelación de uno mismo, de lo que pienso y de lo que siento. En este punto podemos cambiar nuestras emociones negativas insanas.
Una de las formas de cómo hacerlo es la Autocrítica Constructiva. En nuestro lenguaje interno, los errores cometidos en lugar de desvalorizarnos como persona, se convierten en una herramienta de aprendizaje.
También es importante contemplar nuestros deseos, nuestros proyectos, como preferencias; no como exigencias que se deben cumplir si o si. De esta forma seremos más flexibles y abiertos a encontrar soluciones a problemas que vayan surgiendo.
Si pensamos que es posible mejorar nuestra vida, la posibilidad existe. El pensamiento es el primer paso para el cambio.

